La actividad de los líderes políticos, periodistas, activistas sociales y defensores de derechos humanos está permanentemente amenazada en Venezuela. La represión que afecta a cientos de líderes venezolanos se concreta en amenazas, secuestros, acoso a familiares y confinamiento en centros de reclusión donde la tortura constituye una práctica cada vez más frecuente.
Testimonio de ello se encuentra en los videos realizados por la organización Fourteen lawyers en los que se expone el resultado de una investigación que incluye las experiencias de los protagonistas: abogados, exfuncionarios y víctimas.
¿Cómo apoyar desde Colombia? Es una pregunta que frecuentemente surge de la discusión con diferentes actores, que al igual que el Proyecto Migración Venezuela de Publicaciones Semana y la Fundación Ávila Monserrate observan con preocupación la situación descrita y cuentan con recursos, prácticas, ideas, casos y experiencias que pueden nutrir a quienes ejercen este rol desde Venezuela y el exterior.
Con este objetivo se realizó, el pasado 26 de febrero, un conversatorio en las instalaciones de la Revista Semana en el que participaron cerca de 30 líderes, representantes de instituciones, cooperantes y periodistas que trabajan en la defensa de los Derecho Humanos (DD HH). Cabe resaltar la participación desde Caracas, de Ana Leonor Acosta, abogada y directora de la Coalición Pro Derechos Humanos de los presos políticos, y Marianela Balbi, periodista y directora del Instituto Prensa y Sociedad de Venezuela.
Juan Navarrete, miembro del Instituto Interamericano de Derechos Humanos y uno de los fundadores de la Defensoría del Pueblo, en Venezuela, ofreció una introducción sobre las condiciones adversas en las que trabajan las organizaciones de Derechos Humanos para registrar y denunciar casos de represión, detenciones, torturas y persecución política.
«Lo que agrava la situación en el ejercicio de la defensa de los derechos humanos en Venezuela es que a estas organizaciones se les ha decomisado las ayudas humanitarias afectando la atención de los pacientes con enfermedades crónicas o que están a la espera de un trasplante. En algunos casos las personas que lideran estas ONG han sido privados de libertad o han sido hostigados por el régimen de Nicolás Maduro »
Juan Navarrete, venezolano, defensor de los Derechos Humanos
Navarrete reconoció el rol que están desempeñando las organizaciones de DDHH de Colombia para abordar el complejo tema de la migración forzada de venezolanos y su asistencia humanitaria.
Por su parte, la socióloga Ligia Bolívar, investigadora de derechos humanos de la Universidad Católica Andrés Bello manifestó su preocupación por la burocracia existente para otorgar la condición de refugiado a los venezolanos.
“Colombia tiene un sistema disuasivo para el refugio. Hemos visto testimonios de venezolanos torturados que califican para refugiados, pero ellos no pueden esperar dos años a que una burocracia radique un caso y que le digan que durante ese tiempo no tiene derecho al trabajo”, dijo Bolívar tras solicitar a la Cancillería que se agilicen los trámites e integren al refugiado como una persona que tiene necesidad urgente de protección internacional.
Los defensores vieron los videos de la Fundación organización Fourteen lawyers. @BRENDA GUERRERO
La fundación colombiana Puentes Ciudadanos, a través de sus voceros, Pilar Gaitán y Daniel García-Peña expresaron su solidaridad con la población venezolana y reafirmaron su compromiso de fomentar un diálogo binacional atendiendo los problemas fronterizas y sus problemas humanitarios, buscando generar canales de comunicación desde la sociedad civil que hoy no existen desde los gobiernos.
Fabián Cárdenas, coordinador de flujos migratorios y movilidad humana de la Cruz Roja Internacional se comprometió a seguir haciendo incidencias en la atención de la población venezolana vulnerable que está caminando por los pasos fronterizos para llegar a las ciudades de Colombia o a diferentes países de la región. “Seguiremos atendiendo a los migrantes garantizando que tengan un tránsito de manera segura por el país”, dijo Cárdenas.
Para despedir el conversatorio, Marianela Balti agradeció el respaldo y el cubrimiento de los medios de comunicación colombianos hacia el tema de Venezuela. “Hasta que la crisis migratoria no estalló, los países no conocieron las dimensiones reales de la tragedia humanitaria que viven los venezolanos”, concluyó a la vez que abogó por el fortalecimiento del diálogo bilateral entre Colombia y Venezuela, y esta mesa de discusión representó un primer paso, así como la creación de una agenda común entre instituciones colombianas y venezolanas para documentar y gestionar los graves casos de violaciones de DDHH en el vecino país.
Las autoridades de Antioquia y Medellín confirman que lo que sucede es escalofriante y explican cómo están atendiendo a quienes emprenden la travesía. Colectivos de periodistas del vecino país radicados en Medellín organizan una campaña para disuadir a sus paisanos de viajar hacia una muerte segura
