En Colombia, el fenómeno de la Trata de Personas es un delito que afecta y violenta de manera directa la dignidad de hombres, mujeres, niños, niñas, adolescentes y jóvenes en todo el territorio nacional. Esta forma de violencia que produce una violación continua y permanente de los Derechos Humanos de las víctimas, restringe las libertades individuales y vulnera la igualdad.

Con el flujo migratorio proveniente de Venezuela, que parece no desacelerar, muchos de los migrantes están expuestos a ser víctimas de la trata de personas. Particularmente, son los migrantes irregulares quienes se encuentran en mayor riesgo porque su condición irregular favorece su relacionamiento con redes de trata a nivel local, nacional, regional y mundial. Aunque es un fenómeno que no discrimina la condición de sus víctimas ya que también afecta a los venezolanos regulares y los colombo-venezolanos, tal como lo evidencia el último informe sobre la trata de personas del Departamento de Estado de los Estados Unidos.

El Ministerio del Interior, a través del Observatorio de Delitos de Trata de Personas, realizó un estudio con corte a 2018 donde se observó cómo ha variado este fenómeno a raíz de la migración venezolana. Además, la investigación se complementó con una encuesta aplicada a 278 migrantes con la finalidad establecer si existe mayor vulnerabilidad ante un posible delito de Trata de Personas debido a la situación interna que ha obligado a los venezolanos a migrar.