| Por: DAYRON V / PIXABAY
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció este martes nuevas sanciones contra Venezuela, que señalan a siete personas y unas veinte empresas de beneficiarse del esquema de intercambio de divisas. Entre los acusados están Raúl Gorrín, dueño del canal privado Globovisión y altos funcionarios del gobierno, incluyendo al presidente Nicolás Maduro, su esposa y varios ministros y líderes chavistas.
"Los actores del régimen han saqueado miles de millones de dólares de Venezuela mientras el pueblo venezolano sufría. El Tesoro está apuntando a esta red de intercambio de divisas, que es otro esquema ilícito que el régimen de Venezuela ha usado por largo tiempo para robarle a su gente", dijo Steven T. Mnuchin, secretario del Tesoro de Estados Unidos.
La respuesta de Venezuela fue inmediata. El Gobierno tildó estas acciones como ilegales y considera que "el único que puede imponer sanciones internacionales es el Consejo de Seguridad de la ONU".
Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, afirmó que las acciones son unilaterales, porque las impone un gobierno de forma abusiva, e ilegítimas. "Estamos hablando de medidas arbitrarias porque no están contempladas en ninguna ley internacional", expresó.
Venezuela ya presentó acciones concretas contra Estados Unidos ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) para denunciar está sanción y otras medidas comerciales que ya había impuesto el país norteamericano en su contra.
Esta polémica de divisas viene desde 2003, cuando Venezuela impuso un control de cambios. El Gobierno se reservó el monopolio de las divisas que vendía discrecionalmente al sector privado a tasas inferiores a las que operaban en el mercado negro y este diferencial estimuló la corrupción. Según la oposición venezolana, los delitos derivados del control de cambio suman unos 300.000 millones de dólares.
*Con información de AFP.
El Panorama regional de la seguridad alimentaria y nutricional de América Latina 2022, elaborado por varias agencias de la Organización de las Naciones Unidas, destacó un escenario desalentador sobre la situación nutricional en Venezuela.