Los emprendedores venezolanos Pedro Luis Gallardo Ramón Pérez Martínez, en Medellín. | Por: PABLO MONSALVE - SEMANA
Bancamía brinda educación financiera a los emprendedores con su programa ‘Echemos Números’, y con su iniciativa Empropaz, que ofrece procesos de formación socio-empresarial en zonas afectadas por la violencia y la pobreza.
Con el nuevo año, los microempresarios del territorio colombiano se enfrentan a una coyuntura retadora en el espectro económico, global y nacional, que demanda mayor creatividad y conocimiento, además de procesos de acompañamiento de entidades del sector público y privado que les permitan avanzar en su camino de desarrollo empresarial.
Conscientes de esto y con la intención no solo de asegurar la sostenibilidad de los pequeños negocios, sino también de potencializar su progreso, entidades financieras como Bancamía le apuestan a la generación de espacios de formación gratuita en temas clave como educación financiera para la gestión eficiente de los recursos, y otros que fortalecen sus habilidades en temas como contabilidad, marketing digital, innovación de productos y desarrollo organizacional, entre otros.
Una de las herramientas que ha puesto a disposición la entidad es la plataforma de educación financiera “Facilitamos Su Progreso”, una herramienta a la que pueden acceder clientes y no clientes de manera gratuita para educarse en el manejo de productos financieros, cómo llevar sus negocios al mundo digital y hasta les enseña estrategias para organizar sus presupuestos.
Por otro lado, el banco tiene en 92 poblaciones afectadas por la violencia y la pobreza el programa Emprendimientos Productivos para la Paz (Empropaz), el cual se puso en marcha junto a USAID, con el que está brindando formación a colombianos y migrantes venezolanos para impulsar el nacimiento de nuevos emprendimientos y acompañar el fortalecimiento empresarial de microempresas, ya existentes con el propósito que generen habilidades empresariales. Para ello todos los meses abre convocatorias a miles de pobladores que pueden acceder de manera presencial o virtual a estos espacios de educación que se complementan con inclusión financiera en condiciones especiales.
De esta forma, los expertos de Bancamía y Empropaz comparten seis consejos clave que los microempresarios, tanto colombianos como venezolanos, deben tener en cuenta para este inicio de año:
1.- Participar con muestras comerciales en ferias y eventos regionales para ampliar su frontera geográfica y expandirse, tanto a nivel local como regional y nacional.
2.- Utilizar intensivamente los canales digitales para reducir drásticamente los costos de distribución y lograr mayor cobertura. Herramientas como Whatsapp Business, chatbots y la implementación de cuentas en redes sociales, permiten montar catálogos en línea y responder mensajes de posibles clientes en el menor tiempo posible.
3.- Capacitarse constantemente para especializarse cada vez más en actividades y servicios productivos que fortalezcan sus habilidades empresariales.
4.- Aprender a manejar las finanzas de manera responsable para gestionar los costos con sentido de austeridad. Actualmente, hay contenidos y videos en Youtube que pueden ser de ayuda a la hora de llevar las finanzas de la microempresa.
5.- Brindar un valor diferencial para sobresalir frente a la competencia e impactar positivamente con la experiencia de usuario. Para esto, se deben identificar las necesidades, intereses, preferencias y hábitos de los clientes.
6.- Buscar alianzas con otros microempresarios bajo esquemas sencillos de asociatividad, para lograr economías de escala, acceso a nuevos mercados, integración productiva, incidencia, creación de nuevos negocios, mitigación de riesgos y acceso a mejor y mayor tecnología, entre otros múltiples beneficios derivados de la integración empresarial.
Dejusticia lanzó el libro Migración y trabajo decente: Retos para el Sur Global. Las investigadoras, Lucía Ramírez Bolívar y Lina Arroyave plantearon los desafíos que tienen las personas migrantes y refugiadas para insertarse laboralmente en Colombia.