Migrantes devotos trasladan en sus hombros una réplica de la imagen de la Vigen del Rosario de Chiquinquirá que apareció en el Lago de Maracaibo hace 311 años. | Por: CORTESÍA MIGUEL GONZÁLEZ
Hoy es un día de solemnidad y agradecimiento para los migrantes venezolanos radicados en Barranquilla. Están de fiesta espiritual porque es el día de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, conocida popularmente en el estado Zulia (Venezuela) como La Chinita.
A esta hora, las flores y ofrendas de los devotos colman el altar de la iglesia de la Parroquia de Chiquinquirá, ubicada en la calle Murillo Toro con carrera 30, de Barranquilla. Allí se encuentra desde el pasado 15 de noviembre una réplica de la tablita con la estampa de la Virgen María que apareció en las aguas del Lago de Maracaibo hace 311 años.
La historia de devoción venezolana en Colombia arrancó en 2018. Ese año era el primero de la venezolana Darcy Virginia Fernández en la capital del Atlántico. El 18 de noviembre ella recuerda que no paraba de llorar en la iglesia porque extrañaba ver la imagen sagrada de La Chinita que todos los años acompañaba en procesión desde la fundación católica La Providencia, en Venezuela. Ese día se prometió que el año siguiente los devotos venezolanos en Barranquilla tendrían la oportunidad de orar frente a la Virgen, tal como lo hacían en la plazoleta San Juan de Dios, en Maracaibo.
Así fue como Darcy migró esta reliquia de fe y trasladó en su maleta una réplica de La Chinita, en el año 2018. Ya en su casa se percató de que necesitaba una base de madera, le pidió el favor al esposo de una amiga colombiana retornada, el español Joaquín Requesen, quien le talló un retablo. Ese año la gente le dejó ramos de flores, cartas, collares y demás ofrendas como símbolos de agradecimiento a los favores concedidos.
"Fue un momento muy hermoso. Uno siente resiliencia, es tener la bendición de Dios a través de Ella para seguir adelante", rememora Fernández erizada en su piel por la gran cantidad de devotos que se acercaron al templo a ver La Chinita traída desde Maracaibo.
«Ver a La Chinita en Barranquilla nos hacen sentir como en casa. Va más allá de una tradición o costumbre, son actos que nos unen como migrantes y entre tanta adversidad nos llena de fe y esperanza»
Arianna Salazar, migrante venezolana
La Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá le abrió las puertas a los migrantes venezolanos que son devotos de esta virgen. A la misa de hoy solo pueden asistir 50 personas, realizarán una transmisión virtual por @lachinitaenbarranquilla
Tanto venezolanos como colombianos se unen en el Atlántico para celebrar la tercera festividad de La Chinita en Barranquilla, que este año tiene el lema Unidos en Oración, para propiciar un encuentro de fe y bienestar por todos los ciudadanos del mundo en tiempos de pandemia.
Días previos a esta celebración, los migrantes devotos hicieron un recorrido con la imagen por varios templos de Barranquilla: la parroquia Espíritu Santo, Santa Marta, San Joaquín y Santa Ana. En la parroquia Nuestra Señora de Chiquinquirá le hicieron un recibimiento especial el 15 de noviembre, y hoy 18 se le hace la misa de la solemnidad, a las 6:00 de la tarde.
Los organizadores del evento religioso cultural cumplirán las normas de bioseguridad, acatando las restricciones ordenadas por las autoridades para el acceso a la iglesia, por lo que solo habrá un aforo para 50 personas con medidas de distanciamiento. Por ese motivo realizarán una transmisión virtual por las redes sociales de @lachinitaenbarranquilla
El sacerdote Roberto Rodríguez, párroco de la iglesia Chiquinquirá, ha visto con muy buenos ojos el encuentro de los migrantes venezolanos con esta devoción mariana. Los bendice y les abre las puertas de su templo para que mantengan esos lazos de unión, comunión, participación, y apoyo mutuo.
Le parece muy buena la manera cómo están organizados, y los anima a seguir en estas actividades que promueven la participación de los feligreses locales y los demás migrantes. "Es una gran coincidencia que nuestra Patrona de Colombia también sea la patrona de este grupo de venezolanos, que con mucha alegría nos han regalado sus manifestaciones culturales a través de la gaita tradicional", dice Rodríguez unas horas antes de la celebración.
Afianzar esos lazos culturales colombo venezolanos es lo que motiva al comunicador Miguel Ángel González a trabajar cada año por este evento, con el que prentende "sembrar un pedazo de Venezuela" en el Caribe colombiano que lo recibió con los brazos abiertos hace cuatro años.
Como todo migrante, González confiesa que ha pasado momentos muy duros, de ansiedad y desasosiego. Sin embargo, se aferra a su fe por la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, y se dedica con más ánimo a promover con esta actividad la gaita tradicional zuliana con un grupo de músicos venezolanos, quienes tocan instrumentos como el cuatro, el furro, tambora, charrasca y hasta un arpa. "Este es un pequeño agradecimiento a Colombia por habernos recibido. Queremos demostrarle a nuestros hermanos colombianos que no solo pedimos asistencia humanitaria, también aportamos cultura y educación", afirma el también docente universitario.
Esta celebración religiosa venezolana también se realiza en países como Estados Unidos, España, Chile, Ecuador, Italia, Panamá, Perú, y en otras ciudades colombianas como Bogotá y Medellín.
Para el migrante venezolano Jesús Villalobos, quien se consagró en Maracaibo como Servidor de María y prometió custodiar y llevar en sus hombros la sagrada reliquia de La Chinita, hoy es un día de sentimientos encontrados. Por su trabajo no podrá asistir a la misa solemne en Barranquilla. Pero su fervor estará ahí presente, así como también se posará en todas las ciudades del mundo donde hay un migrante zuliano.
A los niños y jóvenes de las comunidades de acogida de Barranquilla, los migrantes venezolanos les enseñan la gaita tradicional zuliana, y a tocar cuatro, furro y tambora. Peloteros venezolanos agradecieron a la Chinita en el Campeonato Mundial sub 23 que se realizón en Barranquilla 2018.
La Alcaldía de Bogotá, en articulación con USAID, ofrece una jornada de orientación y acceso a trámites en la localidad de Ciudad Bolívar, para la población migrante venezolana y retornados colombianos, este 18 de febrero.