El primer cierre de la frontera entre Colombia y Venezuela se produjo en agosto de 2015, por decisión de Nicolás Maduro. | Por: ALEXANDRA RUIZ POVEDA - SEMANA
La reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela traerá un impacto positivo para el comercio en las zonas limítrofes y a nivel general. El empleo es uno de los puntos que más crecerán con la reactivación fronteriza.
El restablecimiento de las relaciones entre Colombia y Venezuela ya es un hecho y los comerciantes que trabajan en las zonas fronterizas, tanto del territorio nacional como del país vecino, esperan con ansias que este anuncio se haga oficial una vez Gustavo Petro, presidente electo de Colombia, se posesione el próximo 7 de agosto.
Con la apertura de la frontera las exportaciones e importaciones no se harán esperar y con esto, la economía de ambos países pueden experimentar a un crecimiento positivo que eleve el porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) de cada nación y que se pueda acceder a una mayor cantidad de productos y servicios.
Por ello, Germán Umaña, presidente de la Cámara Colombo Venezolana, en entrevista con el Proyecto Migración Venezuela, aseguró que el impacto del comercio con la reactivación de la frontera es importante, y que esto también depende de la recuperación de la demanda interna venezolana.
Además, mencionó que son diferentes los sectores de la economía los que se verán beneficiados con la apertura de la frontera por el flujo comercial que se va a presentar una vez se de este acontecimiento tan relevante.
“La mejora de las condiciones de empleo va a significar una mayor demanda y una mayor complementación industrial y productiva en la frontera y eso hace un alivio importante no solo para los comerciantes e industriales sino para todos los prestadores de servicios en la frontera”, afirmó Umaña.
Asimismo, es de suma importancia que se restablezcan las relaciones productivas para que tanto Colombia como Venezuela puedan recuperar la industria y el comercio en las zonas fronterizas.
El presidente de la Cámara Colombo Venezolana destacó que, en los territorios limítrofes como Cúcuta y el Táchira, se reducirá la pobreza de manera considerable y habrá un incremento en la calidad de vida de los ciudadanos de ambas zonas fronterizas.
“Se presentará un alivio en todos los indicadores sociales tan deteriorados en Norte de Santander y el Táchira, va a haber una disminución de la pobreza absoluta, pobreza monetaria, incremento del ingreso pér capita y se cerrarían brechas en los dos países”, concluyó Germán Umaña.
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La Alcaldía de Bogotá, en articulación con USAID, ofrece una jornada de orientación y acceso a trámites en la localidad de Ciudad Bolívar, para la población migrante venezolana y retornados colombianos, este 18 de febrero.