Colombia ha realizado múltiples esfuerzos por atender a la población migrante, especialmente a través de su regularización para permitir su acceso a servicios básicos de salud y educación o su integración al mercado laboral. El impacto económico de esta integración depende en gran medida de si las habilidades de los migrantes complementan o sustituyen las capacidades de la población local y, en consecuencia, fortalecer o presionar el mercado laboral.

El documento describe las principales características de los venezolanos en proceso de regularización en Colombia, encontrando que corresponden a una población más joven y con mayores niveles de educación que la población colombiana en edad de trabajar.  Si se integran adecuadamente en la fuerza laboral, estas personas podrían contribuir al crecimiento económico y a aumentos de productividad en los municipios donde se ubiquen. Para lograrlo, el documento propone desarrollar estrategias a través de la reubicación de la población migrante en forma de cuotas regionales para evitar así, el desplazamiento de los colombianos- cuyas habilidades podrían ser sustitutas de la mano de obra migrante- como una mayor inversión en las regiones con un alto porcentaje de población venezolana o la reubicación voluntaria vía incentivos para reducir la presión en algunas zonas específicas.