El cruce fronterizo entre Colchane (Chile) y la ciudad de Pisiga (Bolivia) se convirtió en los últimos meses en tránsito para caminantes venezolanos, a pesar de la dureza y temperaturas extremas que deben soportar en esa zona. | Por: AFP
El relator especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para derechos de los migrantes, Felipe González, advirtió que la militarización de fronteras en América Latina produciría graves violaciones a los derechos humanos de las personas venezolanas en situación de movilidad.
“La experiencia comparada, incluso en Latinoamérica, demuestra que el recurso de las Fuerzas Armadas en materia migratoria produce graves violaciones a los derechos humanos de las personas en movilidad y que en modo alguno soluciona el problema, sino que lo acrecienta”, escribió en un hilo de Twitter.
González alertó que contener la movilidad humana, especialmente la venezolana, es el episodio más reciente de una serie de medidas contradictorias e improvisadas de política migratoria. Criticó que durante algún tiempo se mantuvo una política migratoria de acogida hacia las personas refigiadas y migrantes venezolanas. Luego, sin embargo, comenzaron a adoptarse medidas cada vez más restrictivas para su ingreso en los países de acogida.
"Ante dicho cambio radical en las medidas de política migratoria, los organismos internacionales alertaron que se produciría un aumento significativo de los ingresos irregulares y del tráfico de personas, con el consiguiente riesgo para las personas en movilidad", añadió el relator especial de la ONU.
La Contraloría General de la República de Chile autorizó este jueves 4 de febrero el despliegue de las Fuerzas Armadas en las fronteras para combatir el tráfico ilícito de migrantes, en un momento de crisis que incluso dejó 2 víctimas mortales, de nacionalidad venezolana y colombiana debido a las bajas temperaturas en la zona.
Esta medida coincide con la tensión surgida, la semana pasada en la frontera entre Perú y Ecuador, y con la intensificación del paso de personas migrantes y refugiadas a Chile por el poblado de Colchane. En ambos casos, se trata del flujo de ciudadanos de nacionalidad venezolana.
La militarización de las fronteras de varios paises sudamericanos como medio para contener la movilidad humana, especialmente la venezolana, es el episodio más reciente de una serie de medidas contradictorias e improvisadas de política migratoria.
— UN Special Rapporteur Migration Felipe González M (@UNSR_Migration) February 4, 2021
[abro hilo]
Una situación de emergencia se vivió este jueves en la frontera de Bolivia con Chile, ante la llegada masiva de migrantes venezolanos. Un niño de tan solo dos años se desmayó al llegar a unas instalaciones deportivas de la ciudad de Colchane, tras pasar varias horas sin comer y caminar largos tramos con su familia por caminos de bajas temperaturas.
El cruce fronterizo entre la pequeña ciudad de Colchane (Chile) y la ciudad de Pisiga (Bolivia) en una zona andina a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar, se convirtió en los últimos meses en camino para los extranjeros, en su mayoría venezolanos, a pesar de la dureza y temperaturas extremas que deben soportar en esa zona.
Una reportera de un canal de televisión chileno narró en una transmisión en vivo que el padre del niño venezolano desmayado tuvo que correr y llevarlo urgente a un centro médico para que le brindaran atención. Aparentemente presentó convulsiones.
El progenitor reveló que caminaron varios kilómetros desde Bolivia hasta Chile. El pequeño pasó la noche a grados bajo cero, con una posible deshidratación y sin haber ingerido alimento en las últimas horas.
Entre lágrimas, el migrante venezolano agregó: "Esto es horrible. Mil disculpas, porque nosotros sabemos que estamos invadiendo, pero la necesidad nos obliga".
La Universidad Johns Hopkins y la Corporación Red Somos, con el apoyo del Ministerio de Salud de Colombia y Onusida, abordó la situación de salud de la población venezolana migrante en el país.