"Necesitamos más compromiso de la comunidad internacional"

Un crecimiento del 900 por ciento en cobertura educativa en dos años y más de 7 millones de atenciones médicas a ciudadanos migrantes son algunas de las cifras presentadas este viernes por el Gobierno nacional en el libro “Acoger, integrar y crecer: Las políticas de Colombia frente a la migración proveniente de Venezuela”, de 250 páginas. 

La publicación, presentada en el marco del Día Internacional del Migrante, fue liderada por la Gerencia para la Frontera y la Migración desde Venezuela y muestra la inversión del Estado para atender a la población venezolana en el territorio nacional.

"Este libro es una forma de contarle al mundo cómo trabajamos en Colombia, (país) que debe ser un participante activo en la reconstrucción de Venezuela", expresó el presidente Duque en la presentación del documento, desde el Palacio de Nariño. 

"El libro blanco" analiza los esfuerzos del Estado en la cobertura de la crisis migratoria, que hasta octubre sumaba más de un 1 millón 700 mil ciudadanos venezolanos en Colombia, el 55 por ciento de ellos en condición irregular.

De la mano de organizaciones humanitarias, Colombia ha recibido en total US$487 millones para la atención del fenómeno migratorio venezolano. De esta cifra, US$350 millones ya han sido desembolsados y el resto está pendiente. 

“Pese al positivo impacto de estas donaciones, no son suficientes para cubrir las necesidades básicas de los migrantes ni un porcentaje significativo de los costos fiscales que ha asumido el Gobierno colombiano, que se estiman entre el 0,19% y el 0,42% del PIB anual”, reseña el documento.

Duque destacó la ayuda internacional que ha recibido Colombia, sin embargo consideró que los esfuerzos deben ser mayores ya que la cruda realidad de la crisis supera las expectativas. Reiteró el llamado a las agencias internacionales de cooperación a realizar el trabajo en conjunto, organizados, sin ataduras, para obtener resultados más destacados. "Me motiva que estemos reunidos agencias y el Gobierno, con ellos podemos avanzar. Necesitamos más compromiso de la comunidad internacional, que los acuerdos con los donantes se traduzcan en recursos económicos", puntualizó el presidente.

De los cerca de mil millones de dólares que Colombia gasta cada año en la atención migratoria, según expresó el presidente, solamente el 10 por ciento proviene de recursos de la comunidad internacional."No se requiere ser un país rico para tomar decisiones de alianzas, protección de menores y regularización", expresó el mandatario.

El libro destaca la educación como uno de los rubros de mayor impacto y crecimiento. En 2018, unos 34 mil niños venezolanos estaban estudiando en Colombia. A corte de junio 2020, esa cifra había ascendido a 351 mil. “Esto pone acelerada presión en las instituciones educativas para adecuar sus espacios físicos, sus aulas, sus estrategias educativas y su material pedagógico, además de sus estrategias de bienestar para los niños y niñas y de gestión de permanencia”, sostiene la publicación.

El 92 por ciento de los migrantes venezolanos están inscritos en colegios públicos, esto exige un nivel de recursos extra para la prestación del servicio adecuado. Vale destacar que el 80 por ciento de los estudiantes se encuentran en situación irregular, por lo que urge la creación de mecanismos para entregar documentos que les permitan estar de forma regular en Colombia. 

El libro blanco de la migración destaca además el trabajo realizado desde el Ministerio de Salud, el cual evidencia números importantes: un total de 7.283.580 atenciones a ciudadanos venezolanos se han realizado en los últimos tres años.  De igual forma, se han despachado desde 2017 hasta junio de este año más de 19 millones de medicamentos. También han sido atendidas más de 145 mil mujeres gestantes.

La atención de mujeres embarazadas ha mostrado números significativos debido al Programa “Niñez primero”, que reconoce a los niños de madres y padres venezolanos nacidos en Colombia desde el 2015. En este sentido, más de 45 mil menores han sido reconocidos de nacionalidad colombiana.

De otro lado, el Instituto de Bienestar Familiar ha logrado la protección de 289 mil niños venezolanos, atendiendo a más de 9 mil madres gestantes en situación vulnerable y se han realizado 1.003 procesos de restablecimiento de derechos. El instituto ha triplicado la atención a la población venezolana en los últimos años. 

El libro enfatiza además en que la migración es una oportunidad. En este sentido, explica que la evidencia internacional muestra que las migraciones traen desarrollo a las sociedades receptoras. Y asegura que el éxito de las acciones de Colombia para responder al fenómeno migratoria radica en un proceso exitoso de integración a la sociedad colombiana, donde estas familias sean en consumidores, contribuyentes, empleados, emprendedores y miembros que enriquecen nuestras culturas.

"No es hacer políticas para migrantes, es incluir a los migrantes en las políticas. El enfoque de Colombia para atender este fenómeno se ha centrado garantizar los derechos de migrantes, refugiados y retornados, así como en crear las condiciones para desarrollar su vida en Colombia en condiciones de equidad", refiere el documento. 

En el lanzamiento del libro estuvieron presentes autoridades y personalidades relacionadas con el tema migratorio como Lucas Gómez, Gerente de Fronteras de la Presidencia de la República; Juan Francisco Espinosa, director de Migración Colombia; el embajador de Estados Unidos, Phillip Goldberg; y el exgerente de fronteras, Felipe Muñoz, hoy Jefe de la Oficina de Migración del Banco Interramericano de Desarrollo. 

Muñoz destacó el trabajo realizado por el BID que ha donado cerca de 20 millones de dólares para programas de inclusión, educación y emprendimiento entre otros.  

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