El Proyecto Migración Venezuela entrevistó a varios candidatos a las alcaldías locales de Arauquita, Arauca y Maicao para conocer las propuestas de sus planes de gobierno frente a la migración venezolana. La percepción negativa de la llegada de los migrantes y la poca comprensión del tema se reflejan en sus respuestas. 

Aunque no hay evidencia sobre la relación entre migración e inseguridad, algunos candidatos respaldaron ese prejucio. En materia laboral, aún persiste la idea de que los venezolanos les quitan el trabajo a los colombianos, pese a que el Dane ya desmintió esa afirmación. 

Claro que no todos los candidatos cayeron en lugares comunes al hablar de migración. Algunos reconocieron que la llegada de los migrantes es una oportunidad para discutir y resolver las necesidades que existen desde hace tiempo en sus poblaciones.  

 

Arauquita: el desafío de la informalidad
 

Para esta candidata, la falta de atención del Gobierno ha obligado a los arauquiteños a ideárselas para acoger a los venezolanos. Dijo que la informalidad laboral y el contrabando son la única opción para muchos migrantes y colombianos retornados que llegan a la población. Además, cree que hay relación entre la migración y el aumento de algunos delitos, como los hurtos. “No quiero decir que culpamos a los migrantes de toda esta problemática, toda vez que ellos son víctimas de una crisis social interna en el país hermano, pero han generado una crisis social en el municipio por esta situación”, dijo Tavera. Como aspirante a la alcaldía, propone elaborar estrategias de atención hacia la población procedente de Venezuela, que sigan las disposiciones del Conpes 3950. Así mismo, considera que los niveles de gobierno nacional, departamental y local deben trabajar juntos, ya que “se hace necesario girar recursos especiales, para atender este asunto que ha rebasado la capacidad logística, administrativa, y social de nuestro municipio”.

 

El aspirante afirmó estar “totalmente de acuerdo con la política del gobierno nacional para atender este fenómeno”. A nivel local, señaló que existe una relación entre la migración venezolana y el aumento del desempleo de los arauquiteños y aseguró que la mendicidad en el municipio se debe a la llegada de los venezolanos. Sin embargo, considera que, debido a la estrecha e histórica relación que existe entre los dos países, Arauquita debe empezar a presupuestar la creación de albergues para los migrantes. Santamaría también propuso llevar a los organismos internacionales a su municipio y priorizar los pagos oportunos al hospital, para que pueda prestar una atención integral a los venezolanos. En materia laboral, propuso consolidar “un banco de hojas de vida tanto de migrantes regulares como irregulares y crear una red de empresas para que contraten personal que cumpla con los requisitos legales y bajo los términos de ley de contratación”.

 

Este candidato respondió las preguntas del Proyecto Migración Venezuela a través de uno de sus asesores de campaña. Su colaborador destacó la preocupación por la falta de control migratorio en el municipio. En general, considera que “la situación de la migración en Arauquita es compleja, por cuenta de la ubicación y de la falta de presencia institucional”. Una de las propuestas de Jhonn Cuartas es “el control y la regularización del flujo migratorio de las personas que ingresan al territorio, además de un control de la naturaleza de empleo que están teniendo”. El principal aspecto positivo que resaltó y que propone aprovechar para facilitar la integración es el hecho de que, “culturalmente, en la región llanera hay una identidad cultural compartida entre los pueblos llaneros, que comprende factores de cercanía”.

 

“El tema migratorio no ha incidido en lo más mínimo como un problema”, dijo este candidato. Sin embargo, habló del aumento de empleo informal en el municipio. En ese sentido, su propuesta es “implementar una política de mayores oportunidades de empleo y ampliar con las instituciones la oferta de atención”. Para lograr esto, dijo que fomentará convenios con el Sena, “con el fin de fortalecer la política de empleo y de oportunidades”. Ante la falta de oportunidades y de apoyo al sector agropecuario y al comercio, Otto Reina propuso garantizar mejores condiciones de vida y establecer mejores relaciones con las cámaras de comercio de la región.

 

Maicao: urgen medidas con enfoque territorial
 

Para el candidato William Alberto Gómez, la llegada de migrantes venezolanos ha hecho explícitas las necesidades que ya tenían los maicaeros, como la falta de servicios públicos, los altos índices de inseguridad o el difícil acceso a la salud. Por eso, propuso declarar “emergencia humanitaria para crear albergues de atención y control, con el objetivo de registrar y clasificar a las personas según su estatus migratorio”. Para Gómez, la política del Gobierno no ha tenido en cuenta la capacidad económica de los municipios y debería ser más fuerte. Por eso, aseguró que solicitará “más patrullas migratorias para que todo migrante tenga su certificado de extranjería y, de no tenerlo, regresarlo”. En su opinión, es necesaria “la mano dura al indocumentado y delincuente”.

 

Para Rosado Ojeda, el manejo de la migración se ha convertido en un tema crítico para Maicao “por la falta de planificación”. Por eso, “necesitamos trabajar de manera articulada con la ONU, la Cancillería, el ICBF y otras organizaciones especializadas en el tema migratorio”. El candidato del Partido Liberal propuso crear una Tarjeta Municipal Migratoria para cuantificar a los migrantes en Maicao. También dijo que creará fincas de paso para que “los migrantes puedan producir y autosostenerse”.

 

Arauca: hacen falta medidas que prevengan la xenofobia
 

Patarroyo, la única candidata mujer en Arauca, hizo énfasis en el tema que más le preocupa en su ciudad: la inseguridad. Según la aspirante a la alcaldía, la migración venezolana disparó la delincuencia y la violencia en Arauca.  Por eso, afirma, “quiero evitar casos que atenten contra la seguridad, la economía, el espacio público y la convivencia de Arauca así que los venezolanos irregulares serán deportados a su país” afirmó. Según Patarroyo, “no hay control en la frontera: el río se convirtió en paso de contrabando y venezolanos irregulares”. Ante esa situación propuso generar mayor integración institucional entre la administración local y la Policía para que haya mayor control. La candidata está de acuerdo con la política migratoria que tiene el Gobierno. Sin embargo, pidió mayor presencia en su territorio, que para ella requiere especial cuidado debido a los grupos armados y a la falta de albergues o sitios de atención para la población migrante.

 

El candidato insistió en que la ciudad está en un periodo de recesión económica y hay crisis por el desempleo. En su opinión, esa situación explica por qué Arauca está dejando de ser una ciudad de destino y asentamiento para los migrantes y, desde hace cerca de un año, se convirtió en un lugar de tránsito hacia el centro del país. “La población que ha quedado es el residuo. Son quienes alimentan el cinturón de pobreza en la ciudad, desplazan la mano de obra y aumentan la inseguridad”, añadió el candidato. A pesar de su opinión sobre los venezolanos en la ciudad, dijo que en su campaña refuerza la idea que en Arauca caben todos. También cree que en  Arauca es necesario crear albergues donde puedan focalizar la población y brindarle atención humanitaria. “El gobierno tiene un decálogo de buenas intenciones, pero no viene con estrategias para poder hacerlo”, concluyó.

 

Velandia cree que la población venezolana puede aportar al comercio en la ciudad. Dado que la mayoría de los venezolanos son migrantes pendulares, el candidato destaca la importancia de mantener abierta la frontera para incentivar el intercambio comercial formal. En esa línea de fomentar la formalidad, hace un llamado a promover la regularización, bien sea con algún tipo de visa o con la ya existente Tarjeta de Movilidad Fronteriza. Para Velandia, tener en cuenta a los migrantes en las decisiones de Arauca no es un asunto opcional, pues “ya los tenemos acá, la migración es una realidad. Tenemos que organizarlos, regularizarlos exigirles nuestros parámetros de seguridad”.