El programa está dirigido para menores de la educación secundaria y la educación media en Bogotá. | Por: GUILLERMO TORRES | SEMANA
Con los aportes de la comunidad, la iniciativa de la Fundación Juntos Se Puede busca asegurar los implementos necesarios para la participación de niños y jóvenes migrantes en este nuevo año escolar.
Con el propósito de asegurar la integración de niños y jóvenes migrantes al sistema de educación pública en Bogotá, por segundo año consecutivo la Fundación Juntos Se Puede lanzó su programa ‘Con Mochilas a la Escuela’. Esta es una iniciativa que busca recolectar útiles escolares para garantizar que los menores cuenten con los elementos necesarios para tener éxito en el ámbito escolar.
El programa funcionará mediante el respaldo de patrocinadores o padrinos, que podrán ayudar a un niño migrante ya sea con la compra de una lista de útiles escolares, el pago de un refuerzo académico, el pago de una actividad extracurricular o con la financiación de los tres servicios juntos.
“Un padrino es más que un patrocinador; un padrino en ‘Con Mochilas A La Escuela’ es un segundo padre que está aportando no solo a la formación académica de estos infantes, sino también al desarrollo de Colombia en años venideros", comentó Ana Karina García, presidenta de la Fundación Juntos Se Puede, conformada mayormente por jóvenes migrantes venezolanos.
"Quienes hoy son niños migrantes, en el futuro van a ser parte de esta comunidad y del desarrollo del país. Entonces apoyarlos para que se formen y puedan estar preparados para el futuro también es apoyar al desarrollo del país y a los procesos de integración”, añadió García.
Nos encontramos en busca de padrinos que quieran apoyar con la integración de los niños venezolanos y colombianos retornados en el sistema educativo.
— Fundación Juntos se Puede (@fjuntossepuede) January 21, 2021
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La iniciativa ‘Con Mochilas a la Escuela’ espera cubrir las necesidades educativas de cerca de 50 menores migrantes y retornados matriculados en los colegios públicos de Bogotá y en edad de escolaridad para la educación secundaria (de sexto a noveno grado) y la educación media (de décimo a undécimo grado).
De acuerdo con la presidenta de la Fundación, para el 2019 en Bogotá habían registrados en el sistema educativo cerca de 200 mil niños provenientes de Venezuela. Por eso, para el proceso de selección de los beneficiarios se tendrá en cuenta un listado entregado por la Secretaría de Educación Distrital, al igual que información de la organización sin ánimo de lucro sobre las familias venezolanas con menores en condiciones de vulnerabilidad.
Adicional a la entrega de útiles escolares -incluído el pago de un plan de internet para evitar la deserción en medio de la pandemia- y el acompañamiento extracurricular, el programa implementará una estrategia de pedagogía con estudiantes y profesores para combatir la xenofobia en las aulas de clase.
“Una encuesta que realizamos con 1.060 familias de la Fundación mostró que el mayor sentimiento de xenofobia estaba en los colegios. Entonces, dentro de los componentes del programa incluimos el trabajo de capacitar a los docentes de la mano de la Secretaría de Educación”, puntualizó Ana Karina García.
Quienes estén interesados en participar de esta causa y convertirse en padrinos del proceso educativo de un niño migrante, podrán hacerlo hasta el cinco de febrero inscribiéndose en el siguiente enlace.
La Universidad Johns Hopkins y la Corporación Red Somos, con el apoyo del Ministerio de Salud de Colombia y Onusida, abordó la situación de salud de la población venezolana migrante en el país.
