El Río Bravo es el último peligroso paso que tienen que enfrentar los migrantes venezolanos que aspiran llegar a Estados Unidos. | Por: COPYRIGHT 2021 THE ASSOCIATED PRESS.
Las difíciles condiciones a las que se enfrentan los venezolanos en su país por la crisis económica y social, siguen ocasionando que diariamente cientos de personas nacidas allí deciden migrar hacia otro territorio.
Los migrantes venezolanos continúan en su travesía por llegar a Estados Unidos y no importa el peligro, las ganas de conseguir una mejor calidad de vida y mejores condiciones de subsistencia, hace que estas personas se enfrenten a cualquiera adversidad para alcanzar el “sueño americano”.
Condiciones climáticas extremas, detenciones ilegales, animales salvajes, violencia xenofóbica y ahogamientos, son los principales peligros a los que se enfrentan los migrantes que tratan de cruzar las diferentes fronteras irregulares.
El último paso al que se tienen que medir los migrantes venezolanos que aspiran arribar a tierras americanas por vías irregulares es el siempre caudaloso Río Bravo, ubicado entre la frontera de México y Estados Unidos. Incluso, según las autoridades mexicanas, hasta la fecha, han encontrado más de 18 cuerpos de migrantes que murieron al intentar cruzarlo.
En este sentido, las condiciones climáticas no han sido las mejores en los últimos días en esta zona, lo cual, genera que los migrantes enfrenten inconvenientes a la hora de cruzar el Río Bravo. Es así que, una patrulla fronteriza rescató a una migrante venezolana que se estaba ahogando al intentar atravesar la corriente.
Según el medio internacional La Frontera, el rescate se dio cuando la mujer perdió sus fuerzas mientras cruzaba el río y tuvo que ser auxiliada por la patrulla fronteriza que le lanzó a otros dos migrantes, que ya habían cruzado, un salvavidas y una cuerda para socorrerla.
Los peligros son muchos, pero son más las ganas que tienen los migrantes venezolanos por alcanzar una mejor calidad de vida, en la que, le puedan brindar a su familia recursos favorables para poder llevar de buena manera la crisis económica y social que vive el país hermano.
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La Universidad Johns Hopkins y la Corporación Red Somos, con el apoyo del Ministerio de Salud de Colombia y Onusida, abordó la situación de salud de la población venezolana migrante en el país.