Pese al cierre de fronteras, el paso por los 39 pasos irregulares en la frontera norte santandereana no ha disminuido. | Por: ESTEBAN VEGA
Desde octubre del año pasado, las autoridades instauraron la ‘Operación Muralla’ para frenar el ingreso de migrantes a territorio nacional por la frontera en Norte de Santander. Sin embargo, por los 39 pasos irregulares identificados por la Policía de Cúcuta y distribuidos entre Puerto Santander, Cúcuta y Villa del Rosario, no ha disminuido el ingreso de migrantes que huyen de Venezuela. De hecho, se estima que en enero de 2021, al menos 25 mil venezolanos cruzaron la frontera por Norte de Santander.
La cifra, obtenida por cooperantes y operadores de refugios que brindan asistencia humanitaria a los caminantes en la vía Cúcuta-Pamplona, fue revelada durante un Consejo de Seguridad realizado este miércoles en Pamplona y en el que participaron el secretario de Fronteras de Norte de Santander, Víctor Bautista; el gerente de Fronteras de la Presidencia de la República, Lucas Gómez; la Policía, el Ejército, autoridades municipales y líderes comunitarios.
Ante las dificultades en la atención a la migración masiva de población venezolana, el gobierno departamental y los alcaldes de Villa del Rosario, Cúcuta, Los Patios y Pamplona solicitaron de forma conjunta al Gobierno nacional mayor celeridad en el trámite de la crisis migratoria en el contexto de la emergencia sanitaria del covid-19.
“Esas 25 mil personas que, con la frontera cerrada y a pesar de todos los esfuerzos de Policía y el Ejército, continúan ingresando bajo condiciones humanitarias críticas, empiezan a presionar fuertemente la frontera e implican un reto y unas demandas de servicios a todos los municipios de la ruta por la cual transitan los migrantes”, señaló el Secretario de Fronteras de Norte de Santander, Victor Bautista.
«Esta situación está creciendo, se hace cada día más crítica y requerirá mayor coordinación entre la Gobernación, los municipios y el Gobierno Nacional. Esperamos que rápidamente el control desde los puntos limítrofes hasta el centro del país tenga mayor control»
Victor Bautista
Secretario de Fronteras Norte de Santander
De igual manera, los mandatarios del nivel local solicitaron al Gobierno nacional más ayuda en la implementación de controles sanitarios en el recorrido que transitan los caminantes. Esto, asegurán, será fundamental para prevenir la propagación del covid-19 en el departamento. “Se requieren controles sanitarios de covid-19 en toda la ruta, que las condiciones de los menores y las familias que están entrando tengan un componente humanitario y que haya un control de seguridad en todos los municipios”, explicó Bautista.
En respuesta a estos requerimientos, el gerente de Fronteras de la Presidencia, Lucas Gómez, indicó que las diferentes organizaciones del Grupo Interagencial de Flujos Migratorios Mixtos (GIFFM) han dispuesto en la ruta Cúcuta–Bogotá un plan de respuesta para caminantes que contiene 17 puntos de atención fijos, seis patrullas móviles distribuidas entre Norte de Santander y Santander, al igual que servicios básicos de salud, alimentación, aseo, asesoría legal, protección de mujeres y menores, entre otros.
Asistencia en Pamplona
Durante el Consejo de Seguridad también se discutieron los avances en torno a la apertura del Centro de Atención Sanitario (CAS) que se espera sea inaugurado a las afueras de Pamplona a finales de febrero.
Entre los compromisos establecidos, se resaltó el respaldo del Gobierno nacional para fortalecer en el municipio los componentes de seguridad, control migratorio y acción humanitaria . Adicionalmente, se estableció la creación de una veeduría ciudadana para hacerle seguimiento al proyecto de instalación del CAS y socializar los componentes técnicos del proyecto.
#GerenteDeFronteras @lgomez4 explica la necesidad de instalar un centro de atención sanitario y transitorio para atención de migrantes. pic.twitter.com/wsvnq1bNwo
— Gobernación de Norte de Santander (@GoberNorte) February 4, 2021
Ante el rechazo que algunos miembros de la comunidad han mostrado frente a la ejecución de este centro transitorio, Gómez aprovechó para explicar el alcance, las implicaciones y los posibles beneficios de la apertura del CAS en el sector de Los Animes. “Estamos convencidos que esto va a mejorar la calidad de vida tanto de las personas que viven en este sector, como de los migrantes que están llegando muy vulnerables a Pamplona”, puntualizó Gómez al cierre del evento.
La migración masiva de personas venezolanas ha ocasionado que algunos países decidan regular a esta población para que puedan circular, estudiar y trabajar con normalidad en el determinado territorio.