El pan de jamón es tal vez el plato más tradicional de la cena navideña venezolana. | Por: MIGUEL GALEZZO L PROYECTO MIGRACIÓN VENEZUELA
Desde hace un siglo, el pan de jamón no puede faltar en la mesa navideña de una familia venezolana. Y ahora, cuando casi tres millones de venezolanos están fuera de su país, este plato se ha convertido en una comida que los conecta con su tierra. Especialmente en esta época del año en la que muchos estarán lejos de casa por primera vez.
© Miguel Galezzo | Proyecto Migración Venezuela
¿De dónde viene el pan de jamón? Según el periodista gastronómico venezolano Miro Popié, autor de El nuevo libro del pan de jamón, la receta se inventó en 1905 en la panadería Ramella, en Caracas. Originalmente era solo un pan relleno de jamón que se cocinaba en vino, clavos, piña, canela y panela. Pero el éxito de ventas fue tal que otras panaderías de la ciudad empezaron a imitarlo y fueron agregando uvas pasas y aceitunas que alteraron la receta original.
Al principio, por su precio, el pan de jamón era un plato que solo se podía disfrutar en diciembre. Con el tiempo, cuando la receta se hizo famosa en las panaderías, y empezó a prepararse en los hogares, se fue ganando un lugar en las mesas navideñas de las familias venezolanas.
¿Cómo se prepara? Es una receta sencilla, con pocos ingredientes y de rápida preparación. Hablamos con la panadera y repostera venezolana Cristina León, que llegó hace dos años a Bogotá y creó CLÔ Postres. Ella nos mostró cómo hacerlo.
Según Cristina, el secreto para un buen pan de jamón está en una buena masa húmeda. Algunos prefieren la masa de hojaldre, pero la receta tradicional se prepara con masa de pan sobao, que está hecha con leche, huevo y mantequilla, no margarina. Los otros ingredientes son jamón, aceitunas rellenas de pimentón, tocineta y uvas pasas.
“Esta es una tradición que no distingue países. Cualquier venezolano donde esté va a buscar el pan de jamón para Navidad y mucha gente intenta hacerlo en sus casas”
Cristina León
Panadera y repostera
© Miguel Galezzo | Proyecto Migración Venezuela
La preparación consiste en extender la masa de pan, humedecerla con mantequilla y agregar el relleno en capas: primero el jamón, después las tiras de tocineta, luego las aceitunas cortadas y las uvas pasas. Por último, se enrolla la masa y se cubre con una capa de huevo. Se lleva al horno durante 20 o 25 minutos a 180 grados. Y eso es todo.
Para que la cena de Nochebuena venezolana esté completa, en la mesa no pueden faltar las hallacas, el pernil de cerdo, la ensalada de gallina y el ponche crema, una bebida hecha a base de huevos, leche condensada, leche entera y ron.
“Comer pan de jamón es traerse un pedacito de Venezuela para acá”, afirma Cristina, quien en esta Navida ya ha vendido más de un centenar de panes de jamón y todavía tiene varios pedidos pendientes. Además, cuenta que aunque la mayoría de sus clientes son venezolanos, ya varios colombianos se enamoraron de este plato típico “importado”.
El programa Empropaz ha apoyado a más de 176.000 personas de 92 municipios, en 17 departamentos, afectados por la violencia y la pobreza, con gestión para el emprendimiento, fortalecimiento empresarial y finanzas productivas.